Nunca creí en que esto
fuera una cuestión de dualidad.
Ya ves, ni de que de fe se
tratara.
Ahora, algo que no es mi cuerpo,
se ha revelado contra él.
Desde lo más profundo,
lo ha convertido en un campo de
batalla;
se enfrentan las pasiones a flor
de piel.
Estás viva, muy viva.
ResponderEliminar