domingo, 4 de agosto de 2013

Cronotopias

Trato de escribir sobre el tiempo, el que pasa, el que queda, el que fue. La nostalgia es un sentimiento demasiado complicado, las unidades de medida también lo son, y no hay forma de conmensurar lo primero con lo segundo. Medir la extrañeza de la ausencia es casi imposible. Los recuerdos que se desgastan a base de revivirlos buscando una respuesta o una sonrisa más lejanas de lo normal. Mirar para atrás implica tensar los músculos del cuello cuando se trata de seguir adelante; luego, la ficción de forzar el campo visual, de agudizar el oído buscando un acento para poder tener la vista al frente y la cabeza en cualquier lado.


Algún día seré una señora canosa, con la vista demasiado cansada que se guiará a tiendas por la vida, con unas manos deformadas por la artrosis y, con suerte, por el exceso de amor. Mientras, anoche, siempre, todavía, el tiempo seguirá pasando. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario